Que tan fuerte somos, que tan sólida esta nuestra fe, quien es la persona que Dios va a usar para terminar con esta pesadilla, podremos seguir confiando en las autoridades de salud, que de cierto hay que todo está controlado, no lo sabemos, las opciones no son muchas, a medida de que pasan los días perdemos las esperanzas y nos arrojamos al abismo, la incertidumbre, la depresión y la ansiedad.
Por un momento te has puesto a observar a tu alrededor, si a tus cuatro paredes, las personas con las que vives, son tu familia, son parte de ti, siempre estuvieron allí y ahora lo notas más, esos son tu iglesia, esos son tus sacerdocio, esos son tus pastores, esas son tus ovejas, este es el momento de edificar tu casa sobre la Roca y sacar, desempolvar, leer y aplicar, La palabra de Dios sobre ti y los tuyos.
«Porque nadie que ha confiado en Dios ha quedado desfraudado.»
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